To my beloved uncle…passed away, but not forgotten (Spanish)

“Querido tío Mauricio,

Es con un corazón pesado que te escribo lo siguiente.

Nunca pensé que te vería de esta manera. Siempre pensé que eras eterno ya que has pasado, y hemos pasado por mucho, tanto aquí como en el extranjero. Siempre pensé que te vería sentado al frente de tu computadora hasta el fin de tus días, o sea por muchos años más.

Nunca pensé que tu vida seria cortada tan pronta y abrupta por los errores de los demás. Tanto pensé que íbamos a seguir viviendo juntos, los tres, que nunca te supe apreciar lo suficiente. Siento que nunca te trate como debería y nunca te dije lo que sentía porque siempre pensé que teníamos muchos más años juntos, para hablarte, para verte, y para discutir contigo.

Ahora tengo que vivir con la culpa y el arrepentimiento de todas esas veces que te trate mal y de nunca haberte dicho la buena persona que eras. Ahora me doy cuenta que las palabras no eran suficientes para decirte cuanto te quiero, cuanto te necesitamos, cuanto te extrañamos y cuanto lo seguimos haciendo. Solo me aferro a la fe y a la esperanza de que algún día te podre ver de nuevo para decirte todas estas cosas. Yo se que ya tu sabes todas estas cosas que te digo hoy, pero nunca podre perdonarme por lo que no hice por ti, ya que tu hiciste tanto por mí, y por nosotros.

Te pido perdón, te pido disculpas aunque sea muy tarde. Nunca sabré si me perdonaste, o me disculpaste. Pero solo sabe una cosa, mi tío querido. Yo nunca me perdonare ni me disculpare por no haberte dicho lo cuanto te amo, y cuanto sigo amándote. Te amo mucho Mauri, aunque no lo haya demostrado. Y te siguiere amando hasta mis últimos días. Igual, siempre recordare todos los buenos tiempos que pasamos en los ochos años en Australia. Ahora estas en un lugar mejor, pero nosotros estamos sin ti. Estas sin dolor, pero nosotros sí. Te extrañamos mucho Mauri, pero ahora estas con Abuelita Carmen, Papito Lalo, Nancita, Mummy, Tia Elena, Tio Jorge, y Tio Osvaldo. Entre todos los mártires y ángeles, tú también eres uno de ellos ahora, mi tío querido.
Nunca te olvidaremos. Tu sobrino, Carlos.”